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Un blog reaccionario

«Verum, Bonum, Pulchrum»

¿Quién teme al nivel del mar?

por | 18 Ene 2023 | Otros artículos

Seguro que Usted, lector, ya lo sabe: el nivel del mar se eleva. Es un hecho. Lo que no sabrá, probablemente, es cuánto. Ni desde cuándo aumenta. Ni si el ritmo de crecimiento es estable o varía. Ni si hay alguna amenaza existencial como consecuencia de ese incremento.

Voy a intentar explicarlo. Es apasionante. Y no se parece a lo que suele leer, ya se lo adelanto.

Vayamos al pasado. A hace unos 20.000 años. Vean:

https://wattsupwiththat.com/2016/07/21/sea-level-rise-acceleration-and-closure/

Como pueden apreciar en el gráfico, el nivel del mar subió rápidamente a causa de la desglaciación (la cuarta). Subió algo más de 120 metros. Se había fundido por completo la capa de hielo llamada Manto Laurentino (y todas las demás), que tenía unos 5 kilómetros de espesor y cubría casi toda Norteamérica. Ese hielo, hecho agua, se precipitó a las cuencas marinas y elevó vertiginosamente el nivel del mar. Pero hace unos 7.000 años, ese nivel se contentó con subir a un ritmo muy suave.

Sabemos, gracias a los hallazgos arqueológicos, que el nivel subió apreciablemente durante el Óptimo Climático Medieval y bajó durante la Pequeña Edad de Hielo[1]. Desde entonces se eleva lentamente, pues lo hemos medido[2]. La variación entre 1950 y 2000 está entre +1.7 mm/año y 2.2 mm/año. Nada que no podamos encajar.

El ritmo actual de subida es incierto, básicamente por dos razones: la elevación del nivel del mar es inconstante debido a los cambios en las mareas lunares[3] y a las oscilaciones y corrientes marinas[4]. Las boyas de medición de mareas muestran una variabilidad natural cada década casi en cualquier parte del mundo, fluctuaciones que hay que compensar. Además, esa elevación es posicional, porque se da una falta de homogeneidad geográfica. La tierra firme no se está quieta debido a varias influencias: la tectónica de placas, el ajuste glacial isostático[5], la extracción de agua de los acuíferos y la compactación del sedimento de los deltas fluviales. Lo dicho, tomado todo esto en cuenta, las estimaciones del último medio siglo oscilan entre 1,7mm./año y 2,0mm./año, con nula aceleración. Vean el gráfico[6].

Good 2022 Climate News the MSM didn’t tell you – Watts Up With That?

Así pues, se ha comprobado un decrecimiento en la tasa de elevación del nivel del mar en las dos últimas décadas[7]. La probabilidad de que el nivel del mar vaya en paralelo con la evolución de la temperatura de la atmósfera es alta, lo que tiene lógica y pueden ver en el gráfico inmediatamente al pie de estas frases. La recopilación de datos comenzó en enero de 1979. Desde agosto de 1996 no hay calentamiento alguno.

Sea level rise slows while satellite temperature ‘pause’ dominates measurement record – Watts Up With That?

Podemos sacar las siguientes conclusiones: una vez más, la coincidencia entre la Pausa en las temperaturas de la atmósfera y la ralentización del alza en el nivel del mar cuestiona las explicaciones dominantes del alza de ambas variables en el último cuarto del Siglo XX. Y además, convierte en muy improbables las proyecciones referidas a la elevación del nivel del mar para el Siglo XXI. Muy improbables. A pesar de la Ciencia, la algarabía continua. Vean tres MSM (Mainsream Media) de febrero de 2022, los tres a la vez[8].

Hemos estado hablando de la NASA (pie de página 6). Cierto, puesto que suyos eran los datos satelitales. Pero ¿son los satélites el mejor método para medir las variaciones del nivel del mar, o acaso las boyas serían más precisas?

La respuesta viene a cuento porque los satélites indican un ritmo de crecimiento del nivel del mar que es aproximadamente el doble del que sugieren las boyas o medidores costeros de mareas[9]. Los medidores de altura de mareas discrepan de la altimetría satelital en un factor de entre (3,4/2,2) 1,5x. ¿Cuál es más correcto?

Más peguntas: ¿Por qué los satélites muestran un ritmo de crecimiento mucho mayor que el indicado por las boyas? Entre aproximadamente 2mm./año y 3,3mm./año, la diferencia es enorme. ¿Por qué los satélites muestran esa aceleración en el ritmo de crecimiento del nivel del mar, que no muestran las boyas en absoluto? ¿A qué se debe la diferencia?

Veamos qué dicen los satélites. Éstos utilizan un radar para medir el nivel del mar[10]. La Universidad de Colorado[11] produce gráficos con los datos satelitales obtenidos por la NOAA[12]. Este que ven a continuación está elaborado incluyendo el solapamiento entre los satélites[13]. La Universidad los excluía, luego verán por qué. Se ven las tasas de incremento, representadas por las líneas rectas, y se menciona la general.[14]

https://wattsupwiththat.com/2021/02/21/munging-the-sea-level-data/

Como se aprecia, los dos primeros satélites muestran una tendencia al alza y los dos últimos otra mayor. Los datos numéricos están en el interior del gráfico. Proceden de los programas de ordenador elaborados con ese fin. Recordemos que un modelo de ordenador no es más que la materialización física de las creencias, la comprensión (y la incomprensión) de la persona que programa el ordenador, en realidad.

Para efectuar cálculos sobre tierra, los ordenadores utilizan la altitud GPS. Con el uso de GPS de fase dividida y medidas repetidas una y otra vez, el resultado presenta una exactitud de hasta ± 10 mm. o mejor. Es impresionante, pero está lejos de alcanzar precisiones de la décima parte de un milímetro como mencionan los informes. Y estamos hablando de tierra firme.

Para los cálculos sobre el mar, que es lo que nos ocupa, la cosa se complica. Hay que mirar en detalle la exactitud y la precisión de las medidas satelitales sobre el mar. Estas mediciones se efectúan lanzando impulsos de radar sobre la superficie del océano y midiendo cuánto tardan en volver al satélite. En el mar, las mediciones repetidas que se hacían en tierra no son posibles porque la superficie marina en cada punto cambia constantemente y además, raramente estará el satélite en la misma posición dos veces. Pero hay más.

Los satélites orbitan a unas 830 millas de altura, que son 1.340 millones de milímetros. Así que, para medir los cambios en el nivel del mar en dimensiones de décimas de milímetro, tendremos que poder medir la distancia entre el satélite y la superficie del mar con una precisión mayor que una parte en 13.000 millones, y eso es muy difícil. Y en el mar, más. Lo más probable es que obtengamos respuestas imprecisas.

Y luego sobrevienen otros fenómenos: la composición, temperatura, nubosidad y humedad de la atmósfera, pues todas estas variables alteran el tiempo que tarda la señal del radar en volver al satélite. Luego están las olas, que evidentemente modifican la altura del océano en miles de milímetros. Y finalmente interviene la deriva del instrumento, es decir, los inevitables cambios que tienen lugar en los instrumentos electrónicos a lo largo del tiempo.

El oceanógrafo Josh Willis[15]afirma: “Es en realidad un logro increíble[16] de la tecnología. Podemos medir el nivel del agua (se refiere al mar) con una exactitud de 1 pulgada desde 800 millas de distancia”[17]. ¿Una pulgada? ¿Cómo que una pulgada?

Una exactitud de 1 pulgada es hablar de una exactitud de 25,4 mm. ¿Cómo osan entonces decir que conocen los cambios anuales en la altura del nivel del mar en décimas de milímetro?

Pues osan y además, se columpian. O sea que, según la Universidad de Colorado, un satélite afirma que el nivel del mar se eleva al ritmo de 2,5 mm./año y ocho días más tarde, cuando el siguiente satélite empieza a enviar sus datos, éste va y dice que el nivel del mar se eleva a 4,1 mm./año[18]. O sea, el alza del nivel del mar ha crecido (y mantenido ese nuevo nivel) en 1,6 mm./año.

Es evidente que no pueden medir cambios del nivel del mar al milímetro, y mucho menos a la décima de milímetro. Pero como los que trabajan en el proyecto son verdaderos creyentes[19], se puede esperar cualquier cosa.

No hay evidencia de aceleración alguna en el ritmo de crecimiento, ni con boyas, ni con los muy mal empalmados datos satelitales. El nivel del mar ha venido incrementándose a unas 8 pulgadas (es decir, 200 mm.) por cada siglo desde hace tiempo y no hay cambios en ese ritmo, salvo acaso una deceleración reciente. Quizá haya que hacer como hacen Barack H. Obama o Bill Gates: dejarse de monsergas y comprar propiedades a la orilla del mar[20]. Estas gentes no temen al nivel del mar.

[1] Este y otros datos los encontrará el lector en muchos textos, entre ellos el titulado “Crimen de Estado” https://www.marcialpons.es/libros/crimen-de-estado/9788472098688/

[2] Desde hace mucho tiempo, con boyas. Más recientemente, también con satélites.

[3] Cuya periodicidad es de unos 18 años.

[4] Con periodicidades de entre 30 y 60 años.

[5] Este ajuste está relacionado con sedicentes cambios en la forma general de la Tierra debido al deshielo de los enromes macizos helados de la última glaciación. La cifra estimada proveniente de modelos ad hoc es de -0,3 mm/año (Peltier, 2001, 2002, 2009; Peltier & Luthcke, 2009)”. Por toda la cara, el resultado hallado por cualquier vía se incrementa en 0,3. Vean el texto: “This means that if we measure a change in GMSL of 3 mm/yr, the volume change is actually closer to 3.3 mm/yr because of GIA”. La referencia es esta What is glacial isostatic adjustment (GIA), and why do you correct for it? | Sea Level Research Group (colorado.edu)

[6] “Annual mean sea level rise in mm/year and its linear trend between 2012 and 2022. NASA data up to September 2022”.

[7] Sorprendentísimamente, durante ese mismo período, los satélites decían medir sucesivos récords (de calentamiento) en la temperatura de la baja troposfera. Esto revela cuán erróneos son los modelos de temperaturas y nivel del mar con los que atemorizan a la población para justificar los descabellados planes de control que se gastan los gobiernos de Occidente, seguidores de la Agenda 2030.

[8] El mismo día 15 de febrero de 2022, de manera perfectamente coordinada, el New York Times, la CNN y NPR hablaban en términos apocalípticos de una elevación desastrosa del nivel del mar para 2050.

NYT: “Coastal sea levels in US to rise a foot by 2050, study confirms

CNN: “US sea level will rise rapidly in the next 30 years, new report shows

NPR: “Sea level rise between 6-18 inches [depending where] over next 30 years

Incluso con los realmente malos sistemas de altimetría de los satélites de la NASA. el ritmo de alza del nivel del mar es de entre 3,2 y 3,4mm/año, es decir, menos de 4 pulgadas en las tres décadas por venir (hasta 2050) … ¡pero no un pie, que contiene 12 pulgadas! Los intentos de los medios de asustar a la gente son ridículos. Y dado lo que cobran, podrían tener más cuidado.

[9] O el mar se eleva más en el centro que en las costas, o hay algún problema a la hora de medir la elevación de ese nivel referido al centro de la Tierra que no toma en consideración lo que ocurre en el lecho marino. Como indica Javier Vinós Good 2022 Climate News the MSM didn’t tell you – Watts Up With That?, la boya de medición de mareas Alicante II muestra un alza del nivel del mar de 10 cm. en 60 años, lo que equivale a 1,666 mm/año. Menos alza que la mostrada por los satélites, efectivamente, siempre.

[10] Desde 1992, cuando se puso en órbita el satélite TOPEX/POSEIDON.

[11] Sea Level Research Group.

[12] La contribución atmosférica de la NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) procede del National Ocean Service.

[13] Que se denominan Topex y Jason 1, 2 y 3. Se van reemplazando cuando terminan su vida útil.

[14] Fuente: NOAA Excel Spreadsheet

[15] Que aparece en esta notable nota de prensa de la NASA New Climate Satellite Measures Sea Level Rise : NPR

[16] Efectivamente.

[17]It’s really kind of an incredible feat of technology,” [Josh] Willis says. “We can accurately measure the water level with an accuracy of 1 inch from 800 miles up.”

[18] ¿Se acuerdan cuando les decía que luego les explicaría por qué la Universidad de Colorado? Por eso la Universidad de Colorado maquilló sus gráficos.

[19] Josh Willis ha dicho literalmente: “sabemos que los oceános elevan su nivel por la interferencia humana en el clima”.

[20] Se trata de viviendas de vacaciones en Martha´s Vineyard, una isla en Massachusetts, con un terreno totalmente llano. El coste de vivir en la isla es un 60% superior a la media nacional y los precios de la vivienda son un 96% superiores. Ambos proclaman en cuanto tienen oportunidad que el nivel del mar sube peligrosamente, pero como siempre pasa con los alarmistas, calentólogos beneficiarios de la estafa global denominada “cambio climático”, sus actos desmienten sus manifestaciones.

Autor del artículo

<a href="https://joseramonferrandis.es" target="_blank">José-Ramón Ferrandis</a>

José-Ramón Ferrandis

Nacido en Valencia (España) en 1951. Licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense. Técnico Comercial y Economista del Estado. Salvo posiciones en Madrid, destinado sucesivamente en Ceuta (España), Moscú (URSS), Washington (EE. UU.), Moscú (Rusia) y Riad (Arabia Saudita). Profesor de Análisis Riesgo País, Análisis de tendencias y Mercados internacionales. Analista. Escritor (Globalización y Generación de Riqueza, África es así, Crimen de Estado). Áreas de especialización referidas a su trayectoria. Con el blog espera poder compartir experiencias y divulgar análisis sobre asuntos de interés general, empezando por el clima y terminando por la Geopolítica; sin dejar de lado la situación de España. Lo completará publicando semanalmente la Carta de los martes, que tiene 4 años de existencia.